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¿CALIDAD O CANTIDAD? |
PLANEACIÓN
DE CLASES BAJO EL ENFOQUE CONSTRUCTIVIST Por: Sergio Guillermo Rodríguez Ruiz El objetivo de este escrito es presentar una reflexión acerca de los elementos ideales que debería poseer una clase de acuerdo con las experiencias de aprendizaje que tuvimos los profesores dentro del módulo denominado “Procesos de enseñanza y aprendizaje” en la Especialización en Docencia. Considerando que el marco teórico que da sustento a esta especialización es el constructivismo, y de acuerdo con los contenidos abarcados (que incluyeron conceptos tales como: las 7 inteligencias, el aprendizaje significativo, la ayuda pricopedagógica, la motivación, los conocimientos previos y las zonas de desarrollo próximo, entre otros), la clase en cuestión debería contemplar. Ø Condiciones medioambientales Lógicamente, el espacio físico debe ser tomado en cuenta. Numerosos estudios prueban que las características del lugar que da contexto a las experiencias influyen sobre la calidad de las mismas. Hay espacios que invitan al estudio, otros en cambio, tienden a distraer, otros más resultan incómodos. La rigidez, la flexibilidad o la apertura de los sistemas de enseñanza o de pensamiento se ven reflejados de un modo u otro en los ambientes que crean. Creo que dentro de la planificación de las clases de un maestro constructivista debe procurar la modificación de los ambientes “tradicionales” en la medida de lo posible. La temperatura debe ser adecuada, hay estudios en Estados Unidos que señalan como la mejor temperatura para trabajar una de aproximadamente 64º, con 65% de humedad del aire, ya que tiende a hacer sentir bien a la gente. La iluminación debe ser suficiente, la luz blanca es mejor. Debe estar aislado del ruido y otras distracciones, incluyendo las interrupciones ya que éstas pueden romper la fluidez del trabajo. Los materiales del curso deben ser adecuados a las características de los alumnos, claros, organizados, coherentes y atractivos en su presentación. Además todos aquellos apoyos adicionales que el maestro planee utilizar cada sesión deben estar a la mano de tal forma que no sea necesario salir del aula por ellos. La disposición del mobiliario debe ir de acuerdo con el enfoque de aprendizaje. Las tradicionales filas no favorecen el mismo, se deben arreglar las sillas de tal forma que se facilite el abordaje de las tareas en pares, pequeños grupos o plenarias. Una de estas formaciones puede ser el círculo o el semicírculo. Además el maestro debe cuidar su desplazamiento a lo largo del aula, de tal forma que comunique de un modo no verbal que está de manera personal con cada uno de los miembros del grupo. La disciplina que estudia este tipo de factores (desplazamientos, distancias entre las personas, comunicación no verbal) es la proxémica. Ø Características generales del alumn@: La “materia prima” (si se nos permite el término) con la que trabajamos los profesores son l@s alumn@s. Es necesario conocer lo más posible acerca de las características de ell@s a fin de ajustar adecuadamente las ayudas psicopedagógicas. Si se supone que el constructivismo es un enfoque centrado en el alumn@, entonces interesa saber sobre él o ella cuestiones tales como: · Que cantidad de ell@s conforman el grupo. · Las edades entre las cuales fluctúan. · Cuántos hombres y cuántas mujeres hay. · Nivel socioeconómico · Lugar(es) de procedencia (antecedentes culturales). · Cuáles son sus expectativas sobre la materia en particular (y sobre la escuela en general). · Cuál es su nivel de motivación en términos concretos, razonados y expresados explícitamente, no sólo verbalizados de manera general y superficial. · Cuál es su nivel de equilibrio fisiológicos suficiente para el aprendizaje (por ejemplo, en lo concerniente a nutrición). · Cuál es el estado que guardan los conocimientos previos pertinentes a los objetivos de la asignatura. Ø Características generales del maestro: Para poder trabajar de acuerdo con el enfoque constructivista se requiere de cierto perfil por parte del profesor; algunos de los rasgos deseables podrían ser los siguientes: · Reflexivo: es capaz de analizar su practica docente utilizando como parámetros los proporcionados por el enfoque constructivista, de manera individual y en conjunto con otros profesores dentro de las academias. · Planea sus clases de un modo adecuado, teniendo en todo momento los objetivos claros de su asignatura en particular y los del modelo educativo en general. Va del todo a las partes y de las partes al todo, como en un sistema. · Flexible: modifica sus estrategias de acuerdo a las necesidades particulares del contexto. Ajusta sus planeaciones sobre la marcha atendiendo a su capacidad de observación y a su sensibilidad de lo que es más conveniente en un momento determinado. · Autoactualizante: utiliza sabiamente la retroalimentación de las sesiones de aprendizaje para modificar sus cursos de acción. · Autorrevelador: cuando es pertinente, comparte con sus alumnos experiencias personales como elementos de ayuda para el aprendizaje, por ejemplo, en lo concerniente a las estrategias de metacognición que él o ella misma usa. · Constructor de relaciones: se ocupa no sólo de los contenidos del programa, sino que, atento al factor humano del aprendizaje, procura establecer relaciones interpersonales con sus alumnos y abrir canales de comunicación con ellos favoreciendo así un clima afectivamente propicio para los estudiantes. Ø Las sesiones, el proceso, las estrategias: Estas deben considerar: · Las 7 inteligencias. Por lo que debe ser variado el tipo de actividades que se diseñen, de tal manera que incluya cada una de éstas. · Las actividades deben incluir oportunidades de interacción y colaboración entre l@s alumn@s. Se debe “socializar” al aprendizaje. · Debe procurarse asociar la materia con estímulos que a l@s alumn@s les resulten agradables. · Debe usarse el aprendizaje “incidental”, es decir, estar atento a lo que va ocurriendo en la clase, al incidente, y tomar éste como “pretexto” (siempre que sea pertinente) para contextualizar el aprendizaje. · Comparando la planeación de las clases con una dieta balanceada, ésta debe ser: variada e incluir de muchas clases de “alimentos” (hasta Postre). Ø Sistema de Retroalimentación: Al comenzar un curso o nuevos contenidos, el maestro parte de los conocimientos previos del alumn@ con el objetivo de que éste construya su propio aprendizaje. ¿cómo valorar los avances de l@s alumn@s? ¿ cómo puede el profesor retroalimentar su práctica docente para actuar en consecuencia? Debe contar con sistemas de retroalimentación que lo guíen. Algunos de éstos pueden ser: · La observación directa clase a clase (aprovechando su experiencia docente). De manera reflexiva el maestro debería terminar cada sesión preguntándose ¿se cumplió el objetivo? ¿sí? o ¿no? ¿por qué? ¿qué acciones correctivas, variaciones o enriquecimiento son convenientes?. · Sondeo (al azar) con los alumnos sobre los contenidos. Antes, durante y al final del curso. · Sondeo con los alumnos sobre sus percepciones. ¿Cómo se siente el grupo con respecto a los aprendizajes que está logrando? ¿Qué tan seguros o inseguros están l@s alumn@s con respecto a estos conocimientos y a su utilización en otros posibles contextos?. · Evaluaciones Ordinarias. Los exámenes que tradicionalmente solicitan las administraciones escolares. · Análisis entre colegas. Intercambio de impresiones con otros maestros.
RESEÑA Sergio Guillermo Rodríguez Ruiz, es Licenciado en Psicología y Estudiante de la Especialización en Docencia en ITESCA. REGRESAR A ENSAYOS EDUCATIVOS VOLVER AL INICIO DE LA PAGINA
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